Marcela López Sastre Texto para Rojo Productora de Arte, Córdoba 2013 La obra de Verónica Di Toro es un excelente ejemplo de la tradición de las vanguardias europeas que tanto eco hizo en Argentina, donde la abstracción geométrica tuvo y tiene aún actualmente una fuerte presencia en la producción artística. La práctica rigurosa que implica este tipo de obras, la pureza de las formas, las investigaciones cromáticas; la decisión de afrontar “la búsqueda” más allá de los referentes ajenos al mundo de la pintura y la inserción en ese espacio abstracto en si mismo involucra absolutamente a los artistas como Verónica, que han tomando la decisión de trabajar en y desde esa posición, adentrándose en el mundo del arte a partir de sus elementos básicos y fundacionales. A su vez, este tipo de obras en la actualidad proponen detenernos en la defensa del oficio, la tradición y la práctica concreta del arte a partir de un formato tan noble y estable como la pintura. Desarrollando un pensamiento reflexivo sobre la forma y el color en las diversas variables que el artista propone a través de su transitar por este lenguaje que representa al hombre desde sus gestos más primitivos. Di Toro para reforzar las posibilidades de la abstracción geométrica en el presente la lleva fuera del marco, instalándola en el espacio, generando planos y cortes de color que transformar la arquitectura en un lugar dinámico mas allá de sus posibilidades funcionales de circulación. Estando estáticos frente a una obra de Di Toro percibimos la vibración del color, algo se mueve desde el ojo e invade el cerebro, desestabilizando nuestra quietud sin movernos. Esta vibración es vital, es contemplación y pensamiento. |